lunes, 5 de agosto de 2013

Asociación libre I

Esta vez no hay historias, lugares, personajes para hilvanar recuerdos posibles o no tanto, pero hay cajones con libretas dentro, fotografías tomadas hace muchos años, textos nacidos de otras inquietudes.
De modo escalonado irán apareciendo entre medio de otras asociaciones quizá mas intencionadas y libres también.
Esta foto es de una calle de Rosario que hice entre 1993 o 1994 con una muy vieja cámara que es como una cajita (una Yashica Mat bifocal) que aún conservo y las poesías breves pertenecen a un conjunto que escribí sobre el 97 o 98 respondiendo a una  propuesta de mi amigo Gabriel, para integrarlas a una serie de imágenes que el había realizado de animales yacentes a la vera del camino y en las veredas de la ciudad (pronto el entendió que estos cuerpos abandonados de animales eran una alegoría de las ausencias humanas) donde vivía y vive que es Tucumán. Su idea era que los textos que yo pudiera escribir observándolas fueran entre foto y foto al momento de la exposición.  Por cuestiones practicas no lo pudo hacer como era su deseo. Pero las palabras que surgieron luego de empapelar con fotocopias de esas imágenes las paredes de la sala y convivir con ellas, ya formaban estas preguntas que no dejarán de interrogar cuanta certeza se les ponga delante. Sigo sin tener ni una sola respuesta a ninguna de ellas.



R.C 2013








pregunta cinco


Estos muros que ahora
son mi piel/ ¿serán
palabras aquietadas
unas
arriba de otras?

Un viento tibio que cierra
los puños/ baja los párpados que
adormece el músculo donde se
engendran los sueños.

¿Habrá puertas en esos muros?
Será mi piel un pasillo por donde
escapar/ para ir a nacer.  



                            
                                           pregunta uno                                                                                


                                     ¿Estos ruidos
                                     vienen del alma?
                                     allí
                                     estarán las manos afiebradas
                                     del que fui
                                     tallando la memoria de todo
                                     cuanto no veré.



                                                  

                                                         pregunta cuatro


Esta quietud
apretando desde los costados
en la claridad de lo mirado

subiendo a los hombros que soportan
la luz pesada de octubre

¿es una quietud
que cesará?

¿Tiene equipaje
o piel?

¿Quién?
le hizo creer que en mi
cuerpo descansa el asma
donde arde su destino.